Recientemente nos llamaron para visitar un hogar al que necesitaban que le hicieran unos arreglillos, necesitaban una reforma integral del baño, de la cocina y de un aseo.
Tras una primera valoración, nos pusimos manos a la obra a diseñar los nuevos espacios, como configurarlos y con los mejores materiales.
Comenzamos con la reforma integral de baño principal.
La idea era reformarlo para convertirlo en un espacio confortable y moderno, que resultara atractivo, pero a la vez funcional.
Al analizar la situación, es posible diferenciar tres zonas principales: el lavabo, el inodoro y la ducha. Al ser un baño grande, es fácil apreciar estas tres zonas.
Para realizar mejor esa división de zonas, vamos a aprovechar el pequeño muro y de este modo, independizar la zona e instalar los diferentes complementos en ambos lados.
Para la zona del WC y mantenerla aislada del resto del baño, se ha utilizado un cristal fumé, dando una mayor sensación de intimidad, sin perder espacio, pudiendo tener la zona iluminada sin la necesidad de crear divisiones, y manteniendo su independencia.
Gracias a la iluminación indirecta que se coloca en el techo, proyectándose sobre la pared, evitamos la aparición de sombras, permitiendo un área muy bien iluminada creando una sensación de espacio muy confortable.
Como ves, las paredes las hemos vestido con revestimientos de la marca Ibero. Para ello hemos utilizado una combinación de Ribbon Artwood Maple, un porcelánico de imitación a madera, con una superficie mate con relieve, y como combinación, hemos utilizado One Grey con un efecto piedra. Ambos rectificados y en un formato de 60×120 cm.
Con esta combinación conseguimos una perfecta armonía y un diseño muy actual. Desde nuestro punto de vista, ha sido todo un acierto.
En cuanto al mobiliario, nos hemos decantado por las opciones y diseños que obtenemos gracias al fabricante Salgar.
Hemos decidido utilizar la serie Monterrey, en color gris fon un acabado lacado en brillo, que aprovechamos para combinar con la serie Alliance natural.
Se trata de un mueble suspendido con dos cajones en cada zona y separados por una pequeña coqueta de dos huecos, de un color más claro para crear un mayor contraste, ampliando así la funcionalidad del mueble.
El lavabo de color blanco y de doble seno para aprovechar mejor el espacio del que disponemos. Una estructura muy cómoda para baños compartidos y tenerlo todo bien organizado.
La encimera sobre la que está este lavabo de la serie Urban de Bath, de gran calidad, hecha con NeoSolid, un producto compuesto de cargas minerales naturales y resinas de alta resistencia.
Con una superficie lisa, cálida y con unas cualidades excepcionales: limpieza, durabilidad, antibacterias y reparable.
En cuanto a los sanitarios y griferías, para el plato de ducha, se eligió con textura Retro, en blanco, de Nudespol, que cuenta con un recubrimiento antideslizante y antibacteriano, para mantener la seguridad en todo momento.
La grifería elegida, en este caso de Tres, acompaña al diseño donde las líneas negras proporcionan todo un juego visual.
Se aprovechó el espacio para colocar una serie de complementos, manteniendo diseño y colores.
Con un radiador toallero plano, con un acabado mate en Antracita, creando un gran espacio para colgar y secar las toallas. Toallero de Hudson Reed.
Para la ducha, se escogió una mampara a medida de apertura corredera, con perfilería exterior en negro y vidrio de seguridad de 8 mm. Sin perfilería interior y con un cierre progresivo de la colección Vita de Profiltek.
Para otros accesorios, contamos con el acabado en negro mate, que combinan perfectamente con el resto de elementos de la colección Lissy Black de Salgar.
Los diferentes mecanismos que restan del aseo son de la colección Simon 100, con un diseño modernista, también en color negro y una estética que se integra perfectamente en la decoración de la estancia.
Para la cocina
En la cocina teníamos la opción de ampliar su espacio, ya que contaba con una pequeña despensa que no se iba a usar, por lo que, al integrarla en el espacio de la cocina conseguimos una distribución más cómoda, sacándole el máximo partido en un espacio acogedor y cálido.
El tono madera fue el elegido para los muebles bajos y las columnas, mientras que los armarios altos tendrían un color blanco, al igual que la encimera de mínimo grosor.
Para proteger la pared del uso diario, el frente ha sido revestido con un cristal extrablanco, convirtiéndolo en una propuesta más decorativa y duradera.
El comedor, con una mesa grande y sus sillas, se ha ubicado en la propia cocina, ya que tras la reforma quedaba espacio para ello. De esta forma, le damos a esta cocina un aire más familiar y acogedor.
Las sillas de este mobiliario mantienen un juego cromático con el papel pintado, que se ha convertido en el protagonista en dos de las paredes, aportando creatividad al este llamativo comedor.
Reforma integral del aseo
Para este pequeño aseo, hemos querido hacerle un pequeño lavado de cara, modificando los sanitarios, el suelo y el revestimiento de la pared.
Para conseguir una composición decorativa de los azulejos, que son los que se llevan el protagonismo, hemos tenido que trabajar duro, ya que la forma irregular que tiene, nos hizo plantearnos diferentes opciones, dando finalmente con la que creemos que es la adecuada y de buen gusto.
Para ello se alicató hasta media altura con una baldosa de formato pequeño, en forma hexagonal, que, a pesar de ser un clásico, siempre es tendencia.
El color neutro de estas pequeñas baldosas combina perfectamente con el suelo imitación hidráulico, generando un ambiente más relajado.
El color blando de la pintura del resto de la pared le proporciona una sensación de ligereza y amplitud que antes no tenía.
¿Qué os ha parecido este trabajo? Espero que las personas que van a disfrutar de estos nuevos espacios estén tan encantadas como nosotros del resultado.